jueves, agosto 10, 2006

Chistes Varios

A cincuenta metros de la playa, una chica, a punto de ahogarse, grita desesperada pidiendo ayuda. Una multitud de bañistas se acerca a la orilla a observar a la pobre mujer.

En eso, un anciano que en su juventud practicó deportes se lanza al mar y con unas cuantas brazadas llega a rescatar a la chica; la toma con un brazo y con el otro nada de regreso.

Al llegar a la playa, el octogenario, cansado, se desploma junto a la mujer.

La muchacha se recupera de inmediato y se levanta mostrando un escultural cuerpo cubierto sólo por un minúsculo biquini de hilo dental.

Se acerca al anciano y coquetona le agradece:

- "¡Buen hombre, no tengo con qué pagarle lo que hizo por mí!"

Recorriéndola con la mirada de arriba abajo, el viejo alcanza a decir:

- "¡Sí tienes, y mucho, el que no tiene con qué cobrar soy yo!"

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Una vez contrataron a una cuadrilla de trabajadores en Tontilndia para pintar la línea blanca en la autopista de cuatro carriles. El primer día rindieron 10 Km., el segundo día 5 Km., el tercero 3Km., el cuarto 1Km. Entonces el encargado de la obra no aguantó más y les preguntó:

"¿Qué es lo que está pasando?, habían empezado muy bién y bajaron muchísimo su rendimiento."

"¡Pues claro! ¡Cada día nos queda más lejos el bote de pintura."

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Esto es una tía que se va a casar y está preocupada. Una amiga suya lo nota y le pregunta:

- Paquita hija, ¿te vas a casar y estas tan depre?

- Es que mi novio me ha dicho que de la noche de bodas ya no pasa, que como no le haga una buena mamada me da una patada en el culo y me devuelve a mi casa...y yo nunca he hecho eso y me da miedo...

- ¡Hija mía! ¡Pero si eso es lo mas sencillo del mundo! Escucha... tu le bajas los pantalones, le bajas los calzoncillos, le haces cosquillitas hasta que se levante el asunto, y una vez que lo veas tieso te lo pones en la boca y mueves la boca como si estuvieses diciendo:

- HOOOONOOOOOLUULUUUU, HOOOONOOOOLUULUUUU

- !Ay Pepa! Que tu sabes que yo no tengo estudios y esa palabra no sé lo que es.

- Coño, ¿que tu no ves las películas americanas? ahí hay una playa muy famosa, mujer.

- !Ah claro! la playa de Honolulu. !Gracias, ya sé lo que tengo que hacer!

Total, que llega el día de la boda, y al día siguiente se vuelven a encontrar. No veas la pinta de la recién casada: la cara llena de moratones, un ojo a la funerala, un brazo roto y dos muletas para andar.

- ¡Paquita, criatura! ¿Que te ha pillado un tren o qué?

- No, que a mi Manolo no le gustó lo de la mamada.

- ¿Pero lo hiciste bien? ¿Le bajaste los pantalones y los calzones?

- Si, si. Y él se emocionó mucho.

- ¿Y le hiciste cosquillitas? mira que es muy importante...

- Claro, claro. Y eso se puso... ¡un poste de teléfonos!

- Y ...

- Si, pues me la puse en la boca, y el se emocionó todavía mucho más, y entonces empecé a decir eso de la playa esa tan famosa:

- ¡MATALASCAÑAS, MATALASCAÑAS!

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Una familia está cenando y el hijo le dice al padre si puede hacerle una pregunta personal. El padre le contesta que sí:

- Papá, ¿cuantas clases de tetas existen?.

El padre extrañado le contesta:

- Bueno, hijo, existen tres clases:

1. A los veinte, las tetas de las mujeres son como melones: redondas y firmes.

2. Entre los treinta y los cuarenta, son como peras: todavía buenas pero un poco caídas.

3. Después de los cincuenta son como cebollas.

- ¿Como cebollas?.

- Si. Las miras y te hacen llorar.

Este comentario enfureció a la esposa y a la hija, por lo que esta dijo:

- Mamá. ¿Puedo hacerte yo una pregunta?. ¿Cuantas clases de penes existen?.

La madre sonrió, miró a su esposo y contestó:

- Bueno hija, el hombre atraviesa tres etapas:

1. A los veinte lo tiene como un roble: grande y fuerte.

2. De los treinta a los cuarenta es como un abedul: flexible pero confiable.

3. Después de los cincuenta es como un árbol de
Navidad.

- ¿Un árbol de Navidad?.

- Si... completamente muerto y seco y las bolas son puramente decorativas!!.

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Este era un niño de 5 años que estaba con su mamá en la parada del autobús y le dice la mamá al niño:
- Cuando nos subamos al autobús le dices al conductor que tienes 4 años, para que no te cobre pasaje.

Entonces se suben al autobús y le dice el conductor al niño:
- ¿Cuántos años tienes?

Y le dice el niño:
- Cuatro.

Y el conductor le dice:
- ¿Y cuándo cumples los 5 años?

Y el niño responde:
- ¡Cuando me baje del autobús!

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Llega Maradona a casa dando gritos:

- ¡Claudia, mi amor!. Te tengo dos noticias, una buena y la otra mala. La buena es que dejé la droga y la mala que no se dónde.

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